Posiblemente nada. Pero no les hacía falta conocer los detalles para saber que tomar un vaso de leche antes de acostarse ayudaba a dormir mejor.

 

Hoy en día, ya sabemos que la leche contiene triptófanos, que es un aminoácido que produce melatonina y promueve la liberación de serotonina.

 

Por ello nos ayuda a conciliar el sueño.

 

Y al estar caliente reconforta y ayuda a despejar las vías nasales.

 

Para que tu sueño llegue antes y descanses bien, pruébalo.

 

¿Qué otros consejos te dio tu abuela? Compartelos en comentarios y dinos si te funcionan.

Dejar un comentario